El Apóstol San Andrés: vida, martirio y oraciones

Andrés, hermano de Simón Pedro, nació en Betsaida de Galilea y fue uno de los primeros discípulos de Cristo. Era discípulo de San Juan Bautista, y cuando este le presentó al Salvador; le creyó y le siguió. Además, fue él quien permitió que muchas personas conocieran a Jesús. por lo anterior, San Andrés es un ejemplo de confianza y santidad para todos los cristianos. 

Su fiesta se celebra el 30 de noviembre y es el santo patrono de Escocia, que incluso tiene la cruz de San Andrés en la bandera, de la Iglesia rumana y de la Marina rusa. 

Biografía del Apóstol San Andrés

Encuentro de San Andrés con Jesús

"Al día siguiente, estaba Juan otra vez allí con dos de sus discípulos.

Y, mirando a Jesús que pasaba, dijo: “Este es el Cordero de Dios». Los dos discípulos, al oírlo hablar así, siguieron a Jesús.

El se dio vuelta y, viendo que lo seguían, les preguntó: “¿Qué quieren?”. Ellos le respondieron: “Rabbí –que traducido significa Maestro– ¿dónde vives?”.

“Vengan y lo verán», les dijo. Fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él ese día. Era alrededor de las cuatro de la tarde.  

Uno de los dos que oyeron las palabras de Juan y siguieron a Jesús era Andrés, el hermano de Simón Pedro. 

Al primero que encontró fue a su propio hermano Simón, y le dijo «Hemos encontrado al Mesías”, que traducido significa Cristo. 

Entonces lo llevó a donde estaba Jesús. Jesús lo miró y le dijo: “Tú eres Simón, el hijo de Juan: tú te llamarás Cefas», que traducido significa Pedro”.

(Juan1:35-42)

Fue gracias a él como San Pedro conoció al Señor. Él también había servido de intermediario en la multiplicación de los panes, pues fue quien llevó a Cristo al joven que cargaba consigo los cinco panes y los dos peces. Además, presentó a Jesús a un grupo de griegos que se le habían acercado.

Evangelización y martirio de San Andrés

Después de Pentecostés, San Andrés emprendió un largo viaje para predicar el Evangelio en Mesopotamia, Bitinia, Éfeso, Tracia marítima, Escitia Menor, Crimea, Bizancio y, por último, en la región al norte del Peloponeso. Además, en Ucrania se considera a San Andrés el primer evangelizador de Kiev e incluso se le considera el primero en evangelizar lo que hoy es Rumanía.

Lamentablemente, su viaje terminó en Patras (Grecia), donde fue martirizado en una cruz; y según la Leyenda Dorada, escrita por Jacques de Voragine, fue el procónsul Egeo quien ordenó su ejecución. 

De hecho, se dice que San Andrés convirtió y bautizó a la esposa del pagano. Luego le dio a elegir: sacrificarse a los dioses romanos o morir en una cruz. Sin embargo, San Andrés eligió la cruz, permaneciendo fiel a Cristo y sin temer esta tortura: “Si temiera esta tortura, no predicaría la grandeza de la Cruz”, se dice que él dijo eso. Además, en el transcurso de los dos días en que sobrevivió, enseñó a las multitudes, predicó la Buena Nueva y cuando expiró, una gran e intensa luz emergió de su cuerpo. 

Por su parte, San Andrés es considerado el fundador de la Iglesia del oriente, mientras que su hermano San Pedro es considerado el fundador de la Iglesia del occidente. En efecto, ambos murieron en una cruz. 

Hoy en día, las reliquias de San Andrés descansan (en su mayor parte) en Amalfi, Italia. No obstante, algunas de las reliquias (sobre todo la cruz) se encuentran también en Patras, en la basílica de San Andrés. 

Tres hermosas oraciones al Apóstol San Andrés

Oración a San Andrés, fundador de la Iglesia del Oriente

“Señor, que has designado a San Andrés, hermano de San Pedro, como patrono de la Iglesia griega. Haznos sentir esta cercanía fraterna en nuestras relaciones mutuas, para que confesemos sin demora con una sola voz la única fe en el único Señor, Dios y Padre, que hemos recibido en el único bautismo.

Ábrenos a las riquezas espirituales de la Iglesia, que sabe muy bien cómo evocar a la Santísima Virgen María, Madre de Dios, cada vez que se recuerda un don de Cristo.

Que, por su intercesión y por las virtudes de su maternidad universal, superemos nuestras divisiones y saboreemos juntos la alegría de vivir como hermanos de Cristo para alabanza de tu gloria y el servicio de nuestros hermanos en la humanidad.

Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor”.

Oración a San Andrés para ayudar a los cuidadores

“Santo Hermano Andrés, día tras día, acogiste con amor y compasión a las personas que acudían a ti para compartir su sufrimiento.

Has conocido el cansancio de esas largas horas dedicadas al servicio de los demás.

Quién mejor que tú podría comprender el cansancio de las mujeres y los hombres que se entregan día tras día al servicio de un ser querido afectado por la enfermedad.

Quién mejor que tú podría compartir el sufrimiento de los enfermos y su alegría por tener cerca a alguien dispuesto a ayudarles día tras día.

Tú, que eres el patrón de los cuidadores, ayúdanos a tener cada día la fuerza de amar a las personas que cuidamos y la alegría de acoger su amor.

Contigo, llevamos nuestras alegrías y nuestros sufrimientos a los pies del Señor.

Contigo, nos encomendamos a San José y a la Virgen María.

Contigo, nos dirigimos a Dios, nuestro Padre, fuente de toda gracia y bondad.

Amén".

Oración a San Andrés para obtener sanación

“San Andrés, a quien nada ni nadie te ha impedido predicar la verdadera fe,

dame la fuerza para eliminar de mi cuerpo el mal que me hace sufrir.

San Andrés, tú que te despojaste de todo para seguir a nuestro Señor hasta el pie de la cruz, líbrame de mi mal, para que pueda dar un poco de bien siguiendo tu ejemplo.

Para que la gracia se extienda por todo mi cuerpo, puedes ordenar al mal que desaparezca en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Amén”.

¡Continúa tu oración con los santos gracias a Hozana!

Hozana te ofrece magníficas comunidades de oración donde puedes rezar a los santos de Dios y caminar con ellos. Por ejemplo:

1. Este retiro “Triduo con todos los santos”, para que te prepares a festejar a todos los santos que ya están gozando de la gloria de Dios y qué tantos favores nos alcanzan. 
2. Esta novena a la virgen de Lourdes, patrona de los enfermos, para que te unas en oración por la salud física y espiritual de todas las personas que padecen de quebrantos de salud.