13 versículos bíblicos sobre el conocimiento
La Biblia nos enseña que Dios puede ser conocido por los hombres, en particular a través de la Creación. El Concilio Vaticano II añade que “Dios, principio y fin de todas las cosas, puede ser conocido con certeza por la luz natural de la razón humana a partir de las cosas creadas” (Dei Verbum, número 6). Partamos, entonces, con Hozana a descubrir trece pasajes y versículos bíblicos sobre el tema del conocimiento.
13 pasajes bíblicos sobre el conocimiento
“Sí, mi boca profiere la verdad, la maldad es una abominación para mis labios. Todas mis palabras son conformes a la justicia, no hay en ellas nada retorcido o sinuoso; todas son exactas para el que sabe entender y rectas para los que han hallado la ciencia. Adquieran mi instrucción, no la plata, y la ciencia más que el oro acrisolado”. (Proverbios 8:7-10)
“El comienzo de la sabiduría es el temor del Señor, y la ciencia del Santo es la inteligencia”. (Proverbios 9:10)
“Tú tropezarás en pleno día; también el profeta tropezará en la noche junto contigo, y yo haré perecer a tu madre. Mi pueblo perece por falta de conocimiento. Porque tú has rechazado el conocimiento, yo te rechazaré de mi sacerdocio; porque has olvidado la instrucción de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos”. (Oseas 4:5-6)
“Y tú, niño, serás llamado Profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor preparando sus caminos, para hacer conocer a su Pueblo la salvación mediante el perdón de los pecados”. (Lucas 1:76-77)
“Jesús tomó la palabra y les dijo: «No murmuren entre ustedes. Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me envió; y yo lo resucitaré en el último día. Está escrito en el libro de los Profetas: "Todos serán instruidos por Dios". Todo el que oyó al Padre y recibe su enseñanza, viene a mí. Nadie ha visto nunca al Padre, sino el que viene de Dios: solo él ha visto al Padre”. (Juan 6:43-46)
“Porque todo cuanto se puede conocer acerca de Dios está patente ante ellos: Dios mismo se lo dio a conocer, ya que sus atributos invisibles –su poder eterno y su divinidad– se hacen visibles a los ojos de la inteligencia, desde la creación del mundo, por medio de sus obras. Por lo tanto, aquellos no tienen ninguna excusa. En efecto, habiendo conocido a Dios, no lo glorificaron ni le dieron gracias como corresponde. Por el contrario, se extraviaron en vanos razonamientos y su mente insensata quedó en la oscuridad”. (Romanos 1:19-21)
“Supongamos, hermanos, que yo fuera a verlos y les hablara en esa forma, ¿de qué les serviría, si mi palabra no les aportara ni revelación, ni ciencia, ni profecía, ni enseñanza?”. (1 Corintios 14:6)
“Demos gracias a Dios, que siempre nos hace triunfar en Cristo, y por intermedio nuestro propaga en todas partes la fragancia de su conocimiento”. (2 Corintios 2:14)
“Que Cristo habite en sus corazones por la fe, y sean arraigados y edificados en el amor. Así podrán comprender, con todos los santos, cuál es la anchura y la longitud, la altura y la profundidad; en una palabra, ustedes podrán conocer el amor de Cristo, que supera todo conocimiento, para ser colmados por la plenitud de Dios”. (Efesios 3:17-19)
“Y en mi oración pido que el amor de ustedes crezca cada vez más en el conocimiento y en la plena comprensión, a fin de que puedan discernir lo que es mejor. Así serán encontrados puros e irreprochables en el Día de Cristo. Llenos del fruto de justicia que proviene de Jesucristo, para la gloria y alabanza de Dios”. (Filipenses 1:9-11)
“Por eso, desde que nos enteramos de esto, oramos y pedimos sin cesar por ustedes, para que Dios les haga conocer perfectamente su voluntad, y les dé con abundancia la sabiduría y el sentido de las cosas espirituales. Así podrán comportarse de una manera digna del Señor, agradándole en todo, fructificando en toda clase de obras buenas y progresando en el conocimiento de Dios”. (Colosenses 1:9-10)
“Ante todo, te recomiendo que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos los hombres, por los soberanos y por todas las autoridades, para que podamos disfrutar de paz y de tranquilidad, y llevar una vida piadosa y digna. Esto es bueno y agradable para Dios, nuestro Salvador, porque él quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad”. (1 Timoteo 2:1-4)
“Hermanos míos, ustedes están prevenidos. Manténganse en guardia, no sea que, arrastrados por el extravío de los que hacen el mal, pierdan su firmeza. Crezcan en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. ¡A él sea la gloria, ahora y en la eternidad!”. (2 Pedro 3:17-18)
Con Hozana, desarrollemos nuestra sed de conocimiento
Desarrollemos nuestra sed de conocimiento con Hozana, ya sea:
- Nuestro conocimiento de las Santas Escrituras con esta:
Comunidad de reflexión diaria del evangelio
- Nuestro conocimiento en la fe con nuestro
Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica
Preguntas frecuentes sobre el conocimiento en la Biblia
¿Qué es el don del conocimiento?
El don del conocimiento, también llamado don de la ciencia, es uno de los 9 dones del Espíritu Santo enunciados en la Primera Carta a los Corintios: "El Espíritu da a uno la sabiduría para hablar; a otro, la ciencia para enseñar, según el mismo Espíritu". (1 Cor 12:8). El don de ciencia nos permite discernir la acción de Dios en la historia, su obra en la creación.
¿Qué versículo habla de la inteligencia?
En la Biblia se menciona a menudo la sabiduría, junto con la inteligencia. La sabiduría viene de Dios y nos permite comprender y actuar según su voluntad. "El temor del Señor es la Sabiduría; apartarse del mal es la Inteligencia". (Job 28, 28) (Encuentra otros versículos de la Biblia sobre la sabiduría)
¿Qué proverbio de la Biblia habla del conocimiento y la instrucción?
"El temor del Señor es el comienzo de la sabiduría, los necios desprecian la sabiduría y la instrucción". (Proverbio 1:7). Muchos otros proverbios hablan de la importancia de la sabiduría y del deseo de Dios de que avancemos en el conocimiento.