Números
Según el orden cronológico de los libros del Antiguo Testamento, el libro de los Números es el cuarto libro después de Génesis, Éxodo y Levítico. Está compuesto por 36 capítulos, y Moisés es su autor principal. Alguna vez te has preguntado ¿por qué se llamó así? Te invitamos a descubrir de qué trata el libro de los Números en la Biblia y a conocer 7 pasajes bíblicos clave.
¿De qué trata el libro de los Números?
Rebelión y arrepentimiento en el desierto
Después de su salida de Egipto, el Señor condujo al pueblo de Israel, dirigido por Moisés y Aarón, al desierto. Sin embargo, esta travesía resultó ser muy difícil y el pueblo no cesaba de quejarse del calor, la sed y el hambre. Además, durante este período tampoco mostró respeto hacia Moisés ni hacia Dios, por lo tanto, el Señor los castigó de múltiples formas al ver tantas rebeliones: con serpientes ardientes, sentencias de muerte poco comunes, derrotas por parte de sus enemigos, etc. Sin embargo, Dios también cuidó de su pueblo y accedió a sus peticiones haciendo llover maná del cielo y codornices, haciendo brotar agua de las rocas y guiándolos con una columna de nubes de día y una columna de fuego de noche.
¿Qué es el maná?
“El maná se parecía a la semilla de cilantro y su color era semejante al del bedelio. El pueblo tenía que ir a buscarlo; una vez recogido, lo trituraban con piedras de moler o lo machacaban en un mortero, lo cocían en una olla, y lo preparaban en forma de galletas. Su sabor era como el de un pastel apetitoso”. (Números 11:7-8)
El censo
El libro de los Números se llama así principalmente debido a las múltiples estadísticas numéricas que contiene, y son el resultado de la petición que Dios hizo a Moisés para que contara al pueblo: “Estos fueron los registrados en el censo de los israelitas, por casas paternas. Los enrolados en la divisiones, agrupados por regimientos, eran en total 603.550 hombres” (Números 2:32)
En el capítulo 26, Moisés hizo un segundo recuento, pero en esta ocasión, ninguna de las personas censadas la primera vez estaban vivas, porque todos, excepto Josué y Caleb, habían desobedecido a Dios.
La Ley de Moisés
A pesar de la desobediencia del pueblo, el Señor siguió dándoles sus leyes y estatutos: “El Señor dijo a Moisés: Manda a los israelitas que alejen del campamento a todos los leprosos, a todos los que padecen de blenorrea y a todos los que se han vuelto impuros a causa de un cadáver”. (Números 5:1-2) Un aspecto maravilloso de este libro, es que Dios sigue siendo fiel a sus promesas a pesar de la infidelidad de su pueblo.
7 pasajes bíblicos clave del libro de los Números
Números 6
“Que el Señor te bendiga y te proteja. Que el Señor haga brillar su rostro sobre ti y muestre su gracia. Que el Señor te descubra su rostro y te conceda la paz. Que ellos invoquen mi Nombre sobre los israelitas, y yo los bendeciré”. (Números 6:24-26)
Números 10
“Cuando el Arca se ponía en movimiento, Moisés exclamaba: ¡Levántate, Señor! ¡Que tus enemigos se dispersen y tus adversarios huyan delante de ti!”. (Números 10:35)
Números 11
“¡Cómo recordamos los pescados que comíamos gratis en Egipto, y los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos! ¡Ahora nuestras gargantas están resecas! ¡Estamos privados de todo, y nuestros ojos no ven nada más que el maná!». (Números 11:5-6)
Números 20
“Y alzando su mano, golpeó la roca dos veces con el bastón. El agua brotó abundantemente, y bebieron la comunidad y el ganado”. (Números 20:11)
Números 14
“Pero Josué, hijo de Nun, y Caleb, hijo de Iefuné –que estaban entre los que habían explorado el país– rasgaron su ropa y dijeron a toda la comunidad de los israelitas: «La tierra que hemos recorrido y explorado es extraordinariamente buena. Si el Señor nos favorece, nos hará entrar en esa tierra que mana leche y miel, y nos la dará”. (Números 14:6-8)
Números 21
“El pueblo acudió a Moisés y le dijo: «Hemos pecado hablando contra el Señor y contra ti. Intercede delante del Señor, para que aleje de nosotros esas serpientes». Moisés intercedió por el pueblo, y el Señor le dijo: «Fabrica una serpiente abrasadora y colócala sobre un asta. Y todo el que haya sido mordido, al mirarla, quedará curado»”. (Números 21:7-8)
Descubre más sobre el pasaje bíblico de la serpiente de bronce en este enlace.
Números 26
“Entre estos no figuró ninguno de los que Moisés y el sacerdote Aarón habían registrado en el desierto del Sinaí. Porque el Señor había dicho acerca de ellos: «Morirán en el desierto». Ninguno de ellos sobrevivió, excepto Caleb, hijo de Iefuné, y Josué, hijo de Nun”. (Números 26:64-65)
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