Rut

En la Bibliael libro de Rut hace parte del Antiguo Testamento, y se sitúa entre el libro de los Jueces y el primer libro de Samuel. Este libro nos presenta la historia de vida de Rut la moabita, que llegó a convertirse en la bisabuela del rey David. Te invitamos a descubrir lo que hizo especial a esta mujer, que, aunque era extranjera, logró hacer parte del linaje de Jesucristo (Mateo 1:5).

¿Quién fue Rut en la Biblia?

Rut y Noemí

El nombre de Ruth significa "compañera". De hecho, ella era una de las dos nueras de Noemí y la que la acompañó fielmente, a pesar de que su suegra le había pedido dejarla: sucedió que, tras la muerte de su marido y de sus dos hijos, Noemí dijo a sus nueras que se volvieran a casar y la dejaran regresar sola a Belén de Judá. Su nuera Orfa estuvo de acuerdo, por lo que volvió a su país y a adorar a sus dioses, mientras que Rut decidió seguir fielmente a su lado. De este modo, Rut aceptó sacrificar un posible nuevo matrimonio en su país, por amor a su suegra. Por esto, se puede decir que, la cualidad más destacada de Rut, que se esconde detrás de esta decisión, es su perseverancia. De hecho, Rut se aferró a su deseo de hacer el bien a la madre de su difunto marido, a pesar de la insistencia de su suegra en que se marchara para empezar una nueva vida, lo cual es sencillamente admirable.

Rut y Booz

Cierto día, después de un tiempo, Rut conoció a Booz, un pariente de Elimelec, su difunto suegro. Este hombre quedó impresionado por su valentía y buena voluntad de servir a su suegra, por lo que decidió esposarla, ejerciendo el derecho que le otorgaba la tradición de aquella época.

5 hermosos pasajes bíblicos del libro de Rut

“Pero Rut le respondió: «No insistas en que te abandone y me vuelva, porque yo iré adonde tú vayas y viviré donde tú vivas. Tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi Dios”. (Rut 1:16)

“Booz le respondió: «Me han contado muy bien todo lo que hiciste por tu suegra después que murió tu marido, y cómo has dejado a tu padre, a tu madre y tu tierra natal, para venir a un pueblo desconocido”. (Rut 2:11)

“Lávate, perfúmate, cúbrete con tu manto y baja a la era. No dejes que te reconozca antes que termine de comer y beber”. (Rut 3:3)

“Y ahora, no temas, hija mía. Haré por ti todo lo que me digas, porque toda la gente de mi pueblo sabe muy bien que eres una mujer virtuosa”. (Rut 3:11)

“Él te reconfortará y será tu apoyo en la vejez, porque te lo ha engendrado tu nuera que te quiere tanto y que vale para ti más que siete hijos». Noemí tomó al niño, lo puso sobre su regazo y se encargó de criarlo”. (Rut 4:15-16)