Ustedes son la sal de la tierra

Los discípulos escribieron los Evangelios para que conozcamos las obras y enseñanzas de Jesús durante su vida terrenal. Por ejemplo, el Evangelio según Mateo cita las siguientes palabras de Jesús: "ustedes son la sal de la tierra" justo después de haber listado las Bienaventuranzas, De hecho, la Biblia dice que durante el Sermón del monte o de la montaña, que se relata en los capítulos 5, 6 y 7 del Evangelio de Mateo, Jesús enseñaba a la multitud y les habla en parábolas. Además, en esa ocasión dijo a las personas que lo escuchaban: “ustedes son la luz del mundo” (Mateo 5:14). Te invitamos a descubrir cómo Jesús describe el papel del creyente a través de esta hermosa ilustración. 

La sal de la tierra en los evangelios

“Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué se la volverá a salar? Ya no sirve para nada, sino para ser tirada y pisada por los hombres” (Mateo 5:13).

“La sal es una cosa excelente, pero si se vuelve insípida, ¿con qué la volverán a salar? Que haya sal en ustedes mismos y vivan en paz unos con otros»” (Marcos 9:50).

“La sal es una cosa excelente, pero si pierde su sabor, ¿con qué se la volverá a salar?” (Lucas 14:34).

Seamos la sal de la tierra 

El Señor dijo estas palabras a todos los que lo escuchaban; nótese que Él no solo habló a sus discípulos, sino a todas las personas que estaban presentes en ese momento. Incluso, podemos decir que este mensaje sigue vigente en la actualidad, es decir, se aplica a todos aquellos que escuchamos o leemos su Palabra. Debemos entender que somos la sal de la tierra. ¿Pero qué significa esto? Para saber lo que el Señor quiere decir con esta expresión, debemos detenernos a analizar qué es la sal y para qué se usa: se puede decir que la sal da sabor a los alimentos y hace que lo que comemos sepa mejor. De hecho, cuando sentimos que a una comida le falta sabor, inmediatamente le añadimos una pizca de sal. Del mismo modo, Dios nos ha puesto en este mundo y llenado de su sabor (alegría, paz y justicia) para que lo transmitamos a los demás. No seamos indiferentes: miremos a nuestro alrededor y reconozcamos que al mundo le falta sabor. La buena noticia es que nosotros los creyentes somos la respuesta que puede devolver la esperanza y la vida al mundo. Dicho esto, no lo dudemos más y ¡pongámosle sazón a este mundo!

 Descubre como ser la sal de la tierra con Hozana

Todo cristiano está llamado a irradiar la alegría y el amor de Cristo a su alrededor. Para que la luz no se apague y para que la sal no se vuelva insípida, es importante alimentarse diariamente de la Palabra de Dios, por eso Hozana te ofrece diversas comunidades de oración en torno a la Biblia para que te conectes con el Señor y des sabor a los que lo necesitan. Por ejemplo, te invitamos a:  

  • Descubrir la comunidad “la reflexión del día”, para que recibas cada día una buena dosis de alegría y animes a otros mediante las Santas Escrituras.
  • Inscribirte en la comunidad “el Evangelio del día” para que cada mañana puedas leer una meditación de la Palabra tomada de un líder espiritual.
  • También puedes recibir diariamente una palabra de la Liturgia de las horas u Oficio Divino, inscribiéndote en esta comunidad de oración en línea.

Recuerda: Santa Catalina de Siena decía: "Si eres lo que debes ser, incendiarás el mundo entero"…Los santos son personas como nosotros que aprendieron a vivir una vida agradable ante Dios. ¡Déjate guiar por ellos hacia Cristo mediante esta comunidad en línea y sé la sal que este mundo tanto necesita!