Nuevo Testamento

El Nuevo Testamento es la segunda parte de la Biblia cristiana que se sitúa después del Antiguo Testamento. Allí podemos encontrar no solo la vida y enseñanza de Jesús, sino también los primeros momentos de la Iglesia que se cuentan en varios libros, por ejemplo: los cuatro Evangelios, los Hechos de los Apóstoles, las Epístolas, etc… ¿Te gustaría conocer un poco más sobre el contenido de esta parte tan importante de la Biblia? ¿Alguna vez te has preguntado qué se puede encontrar en él, qué libros contiene y quién los escribió? Entonces te invitamos a descubrir un poco más sobre estos textos sagrados que constituyen los fundamentos del cristianismo.

¿De qué trata el Nuevo Testamento?

Esta parte de la Biblia habla sobre la nueva alianza que Dios hizo con el pueblo a través de su Hijo, el Mesías, Jesucristo, la cual nos muestra a Dios como un padre misericordioso, que vino para encontrarse con el ser humano, vivir su condición y salvarlo de ella. 

El Nuevo Testamento también nos revela la Buena Noticia: Dios, en su infinito amor, nos envió a su propio Hijo para ser nuestro salvador. Jesús, al aceptar morir en la Cruz, abrió la puerta de la salvación para el hombre, y al resucitar, venció la muerte y nos dio la Vida Eterna.

Jesús nos habla del Reino de Dios y nos muestra el camino para llegar hasta allí:

“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino por mí” (Juan 14:6).

Además, nos deja en su Palabra un gran mensaje de amor y esperanza, el cual es un pilar central del Nuevo Testamento:

“Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado”. (Juan 15:12)

Los 27 libros del Nuevo Testamento

Al igual que el Antiguo Testamento, el Nuevo Testamento es un conjunto de libros que se atribuyen a diferentes autores bastantes diversos, entre los cuales encontramos a los cuatro evangelistas (Mateo, Marcos, Lucas y Juan), a algunos discípulos de Jesús, como Pablo, entre otros. Cabe anotar que, estos textos se encuentran entre los textos sagrados porque, para los creyentes, fueron inspirados por el Espíritu Santo y revelan la Palabra de Dios.

El Nuevo Testamento se compone de un conjunto de libros que se conocen como los 27 libros "canónicos", los cuales fueron establecidos desde el Concilio de Roma en el siglo IV, y que listamos a continuación:

  • Los cuatro Evangelios (Evangelio de Mateo, Evangelio de Marcos, Evangelio de Lucas y Evangelio de Juan) relatan la vida de Jesús y su enseñanza, lo cual incluye momentos como su nacimiento, su bautismo por medio de Juan el Bautista, su muerte, resurrección y posterior ascensión al cielo. En cuanto a su contenido, se puede decir que, las palabras y acciones de Jesús que se relatan en estos libros corresponden esencialmente a su “vida pública”, desde los 30 hasta los 33 años (edad de su muerte).
  • Los Hechos de los Apóstoles nos cuentan episodios sobre las primeras comunidades cristianas y la misión evangelizadora de los apóstoles y discípulos de Cristo para anunciar la Buena Nueva a todos, lo cual incluía tanto a los judíos como a los gentiles.
  • Las cartas o epístolas, como su nombre lo indica, son cartas que los discípulos escribieron a las distintas comunidades cristianas, las cuales permitieron seguir enseñando, animando y guiando a los miembros de las diferentes iglesias que habían sido constituídas. Si bien es cierto que las más conocidas son las epístolas de Pablo, también existen otras bastante ricas en contenido, como las de Juan, Santiago, Pedro, Judas, entre otros.
  • El Apocalípsis de Juan es el último libro del Nuevo Testamento, el cual nos habla del fin de los tiempos, de manera simbólica y según una profecía de Juan.

Los principales personajes bíblicos del Nuevo Testamento

Sin duda alguna, Jesús es la figura central del Nuevo Testamento que nos revela el plan de amor de Dios para la humanidad, a través de:

  • su vida (y especialmente de su muerte y posterior resurrección), 
  • sus enseñanzas (incluyendo sus parábolas, el Sermón de la Montaña), 
  • y sus acciones (actos de compasión y milagros).

Además, en los Evangelios podemos encontrar a muchas personas cuyos corazones fueron tocados por Jesús, tal es el caso de Zaqueo, la samaritana, María Magdalena, etc. Los textos bíblicos también nos revelan diferentes actitudes de las personas al encontrarse con Jesús: si bien es cierto que algunos que fueron transformados radicalmente, como los personajes que se acaban de mencionar, también es cierto que otros, influenciados por el espíritu del mundo, se negaron a dejarse amar, tal es el caso de Judas, que traicionó a Jesús, Poncio Pilato que se "lavó las manos", entre otros…

Por último, cabe anotar que Jesús estuvo acompañado por sus apóstoles, quienes en realidad fueron sus primeros discípulos. Más adelante, en el libro de los Hechos de los Apóstoles, y luego en las Epístolas, encontramos a otros discípulos de Cristo, como Esteban y Timoteo, quienes ayudaron a difundir la Buena Nueva y a edificar las primeras comunidades cristianas.

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