Yo soy la luz del mundo

“Jesús les dirigió una vez más la palabra, diciendo: «Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida»” (Juan 8, 12). Para ponerte un poco en contexto, estas fueron las palabras que Jesús dijo a los fariseos después de haber defendido a la mujer adúltera, a quienes consideraban digna de ser apedreada. ¿Alguna vez te has preguntado qué significa concretamente la expresión "luz del mundo"? Entonces te invitamos a descubrir en la Palabra de Dios lo que implican estas palabras de Jesús y otros pasajes bíblicos del Nuevo Testamento que nos muestran a Jesús como la luz de vida.

¿Qué significa ser la luz del mundo?

Iluminar

Sin luz, no hay vida. Esto lo vemos en el primer capítulo del libro del Génesis, cuando “Dios dijo: «Que exista la luz». Y la luz existió” (Génesis 1:3). Precisamente, fue justo después de esto que el Señor comenzó la obra de crear el cielo y la tierra. Del mismo modo, como seres humanos necesitamos la luz para trabajar con eficacia y ver si lo que hacemos es bueno o malo. Al respecto, el Evangelio de Juan da testimonio de Jesús como “la luz verdadera que, al venir a este mundo, ilumina a todo hombre. (Juan 1:9).

Dar ejemplo

En el siguiente versículo, Jesús dijo: “(...) El que me sigue no andará en tinieblas (...)” (Juan 8:12), dándonos a entender que ser luz no solo significa ser un modelo o una persona a seguir, sino también mostrar el camino. De hecho, Jesús promete a todos aquellos que siguen su ejemplo de vida que no serán vencidos por las tinieblas de este mundo. 

Dar vida

Este versículo de la Biblia termina con una promesa: “(...) tendrá la luz de la Vida” (Juan 8:12). Ser la luz también es poder comunicar la vida a los que nos siguen. Cuando creemos que Jesús es la luz del mundo, Él nos comunica la vida verdadera. Pero, ¿concretamente, qué es esta vida verdadera? Pues es la vida eterna, es decir, la vida en comunión con Dios para siempre. 

Pasajes bíblicos que presentan a Jesús como la Luz del mundo

Juan 1

“En ella estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la percibieron. Apareció un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan. Vino como testigo, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por medio de él. El no era luz, sino el testigo de la luz.La Palabra era la luz verdadera que, al venir a este mundo, ilumina a todo hombre” (Juan 1:4-9).

Juan 3

“El que cree en él, no es condenado; el que no cree, ya está condenado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios. En esto consiste el juicio: la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas” (Juan 3: 18-19).

Juan 8

“Jesús les dirigió una vez más la palabra, diciendo: «Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida».” (Juan 8:12).

Juan 9

“Mientras estoy en el mundo, soy la luz del mundo” (Juan 9:5).

2 Corintios 4

“Porque el mismo Dios que dijo: «Brille la luz en medio de las tinieblas», es el que hizo brillar su luz en nuestros corazones para que resplandezca el conocimiento de la gloria de Dios, reflejada en el rostro de Cristo” (2 Corintios 4:6).

Efesios 5

“Porque todo lo que se pone de manifiesto es luz. Por eso se dice: Despiértate, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y Cristo te iluminará” (Efesios 5:14).

¡Eres la luz del mundo!

En el Evangelio de Mateo, Jesús habló a los que lo escuchaban diciendo: “Ustedes son la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en la cima de una montaña.” (Mateo 5:14). De este modo, Jesús dice que todos los que le escuchan y creen en su palabra son la luz del mundo. Al respecto, el apóstol Pablo hace énfasis en este punto al recordar a los cristianos: “antes, ustedes eran tinieblas, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de la luz.” (Efesios 5:8). Por lo tanto, hoy en día nos corresponde creer en las palabras de Jesús y ponerlas en práctica, para que nuestra luz brille en este mundo tan oscuro.

 [community-card id=9130]

Sigue la luz de Cristo con Hozana

 Jesús nos guía, conforta, restaura y hace brillar con su luz, por eso, en Hozana queremos invitarte a descubrir cómo esta luz puede cambiar tu vida un poco más cada día, por medio de los retiros y comunidades en línea que te proponemos. Por ejemplo:

¡Ven, ora y sigue a Jesús con Hozana!