ADVIENTO: camino de preparación junto a la Virgen de Guadalupe
Una reflexión personal y comunitaria para cada Domingo de Adviento, como un camino de preparación para el nacimiento de Jesucristo Redentor, hijo de María de Guadalupe.
¿Qué es el Adviento para los cristianos?
La liturgia de la Iglesia da el nombre de Adviento a las cuatro semanas que preceden a la Navidad, como una oportunidad para prepararnos en la esperanza para la llegada del Señor. Es además un período privilegiado para los cristianos ya que nos invita a recordar el pasado, nos impulsa a vivir el presente y a preparar el futuro.
ADVIENTO de la mano de la Virgen de Guadalupe
Cada año, este tiempo se enriquece con celebraciones diversas, entre ellas la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe el 12 de diciembre, que en el corazón del Adviento el “Tepeyac” es como “Belén”, donde la Virgen trajo el sol que ilumina la oscuridad de la noche, la Buena Noticia pues nos ha nacido un Salvador, Jesucristo, del cual San Juan Diego es el ángel que anunció a a todos sin excepción.
Además, considerar a la Virgen de Guadalupe en nuestra reflexión es muy importante dado que desde el 12 de diciembre de 2022, el Papa Francisco señaló que en 2031 se celebrarán 500 años del Acontecimiento Guadalupano, es decir, de aquél encuentro tierno y amoroso en 1531, entre Nuestra Señora de Guadalupe y San Juan Diego en quien está todo el mundo representado.
¿Por qué unirse a esta comunidad?
El Santo Padre nos invitó a iniciar un camino de 9 años, a través de la Novena Intercontinental Guadalupana que, como proceso evangelizador, busca en su objetivo principal que las personas podamos reencontrarnos con Dios a través de la Virgen de Guadalupe, buscando nuevos caminos en la reconstrucción del tejido social y eclesial de nuestros pueblos y comunidades, para celebrar juntos el Acontecimiento Guadalupano.
La Novena es una invitación para vivir este reencuentro con Dios, no solo en torno al mes de diciembre o solamente el día 12 de diciembre que celebramos a la Guadalupana, sino también durante todo el año litúrgico, en distintos momentos y especialmente en las festividades marianas, como en este Adviento 2023.
Si te unes, podrás tener:
- 4 momentos de reflexión personal y comunitaria, una para cada Domingo de Adviento, para disponer el corazón al nacimiento de Jesucristo Redentor, hijo de María de Guadalupe, la Madre del verdadero Dios por quien se vive.