Día 1: La Interioridad
Invocación al Espíritu Santo
Ven Espíritu Santo. Ven, Oh, don de Dios que nos santifica. Ven y descúbrenos la voluntad divina. Ven y danos la actitud adecuada para obrar conforme a las mociones del Padre. Ven y guíanos en el seguimiento de Cristo. Ven y fortalece nuestra fidelidad a la Iglesia. Ven y enséñanos a servir a la humanidad. Ven y acompaña nuestra oración en este día.
Meditación para el primer día: la interioridad
Iluminación Bíblica:
Pero ahora dejen todo eso: el enojo, la pasión, la maldad, los insultos y las palabras indecentes. No se mientan unos a otros, porque ustedes se despojaron del hombre viejo y de sus obras, para revestirse del hombre nuevo, que por el conocimiento se va renovando a imagen de su creador. ─Colosenses 3, 9-10
Motivación agustiniana:
Viajan los hombres por admirar las alturas de los montes y las ingentes olas del mar, y las anchurosas corrientes de los ríos, y la inmensidad del océano, y el giro de los astros, y se olvidan del viaje al interior de sí mismos. ─Conf. 10, 8, 15
Meditación en audio
Reflexión: Interioridad
San Agustín nos invita a ir al corazón, pues en el interior de cada ser humano reside la verdad, la verdad de Dios y la de nosotros mismos.
Reconoce San Agustín que cuanto de bondad había en su madre, todo ello era don de Dios.
- Un Padre Nuestro
- Diez Ave Marías
- Un Gloria
Oración final
“Dios, separarse de ti es caer; volver a ti, levantarse; permanecer en ti es hallarse firme. Dios, darte a ti la espalda es morir, convertirse a ti es revivir, morar en ti es vivir. Dios a quien nadie pierde sino engañado, a quien nadie busca sino avisado, a quien nadie halla sino purificado. Dios dejarte a ti es ir a la muerte; seguirte a ti es amar; verte es poseerte. Ahora te amo a ti solo, a ti solo sigo y busco, a ti solo estoy dispuesto a servir, porque tú eres el Señor. ¡Amén! (Con base en Soliloquios 1, 1, 3. 5)
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"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6