¡Bendito el que viene como rey!

Imagen principal de la publicación

Desde el domingo de ramos, el cambio de la multitud que aclamaba a Jesús en Jerusalén es anunciado por la lectura del Evangelio de la pasión. La realización triunfal de las expectativas humanas se ensombrece por la muerte de Jesús. ¿Se repite hoy esta historia? ¿los deseos del hombre siguen opacándose con la muerte? No lo creo...

Viviremos en los próximos días el drama que vivimos los hombres, el rechazo al amor incondicional y gratuito de Dios. En su Hijo, Dios se abajó, se hizo hombre, vulnerable. Hasta tal punto que fue clavado en una cruz. No podía escapar a la muerte. Sin embargo, Jesús va libremente a la cruz, es la ofrenda última que Jesús hace de su vida. 

Y toda la semana que se abre ante nosotros está aclarada por la mañana de Pascua. El hecho de que la cruz no tenga la última palabra es anunciado por San Pablo desde el día de hoy: "de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.". En Jesús resucitado, el poder de la muerte ha sido vencido y Jesús nos invita a unirnos a Él para participar en su victoria. Nuesra aspiración a la vida es recibida en Dios. 

Te propongo entrar en el Evangelio propuesto para la procesión de ramos: "En aquel tiempo, Jesús echó a andar delante, subiendo hacia Jerusalén. 

Al acercarse a Betfagé y Betania, junto al monte llamado de los Olivos, mandó a dos discípulos, diciéndoles: —«Id a la aldea de enfrente; al entrar, encontraréis un borrico atado, que nadie ha montado todavía. Desatadlo y traedlo. Y si alguien os pregunta: "¿Por qué lo desatáis?", contestadle: "El Señor lo necesita"».

Ellos fueron y lo encontraron como les había dicho. Mientras desataban el borrico, los dueños les preguntaron: «¿Por qué desatáis el borrico?».

Ellos contestaron: —«El Señor lo necesita».

Se lo llevaron a Jesús, lo aparejaron con sus mantos y le ayudaron a montar.

Según iba avanzando, la gente alfombraba el camino con los mantos. Y, cuando se acercaba ya la bajada del monte de los Olivos, la masa de los discípulos, entusiasmados, se pusieron a alabar a Dios a gritos, por todos los milagros que habían visto, diciendo: —«¡Bendito el que viene como rey, en nombre del Señor! Paz en el cielo y gloria en lo alto».

Algunos fariseos de entre la gente le dijeron: «Maestro, reprende a tus discípulos».

El replicó: —«Os digo que, si estos callan, gritarán las piedras».


Claves para el camino: Ante el Evangelio propuesto para la procesión de ramos, te recomiendo situarte en medio de la multitud. Reconoce a Jesús como rey, como Aquel que viene en nombre del Señor. Alábalo y reconoce lo que ha hecho por ti. Pídele la gracia de acompañarlo muy de cerca en esta semana santa. Pídele que te ayude a no olvidar quién es Él, cuando se presente débil y sufriente. Que sepas reconocer la vida detrás de su muerte injusta. 

¡BUEN CAMINO HACIA LA PASCUA!

   

Oración de la comunidad

Padre nuestro

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

¡Gracias! 159 personas oraron

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

Cuaresma

Me inscribo