Abandonarse en manos de Dios
A diario se nos presenten muchos retos y dificultades que no sabemos como abordar, es natural sentir que perdemos el norte o que no sabemos que hacer, hay momentos que sentimos que estamos atrapados en un pozo oscuro sin salida, allí precisamente cuando tocamos fondo es el momento oportuno para afianzar nuestra relación con Dios, es difícil, si pero no imposible.... y se preguntaran, que tiene esto que ver con la dignidad? ... pues muchísimo, porque precisamente en tiempos de crisis es cuando las tentaciones se hacen mas fuertes y mas presentes como camino fácil para "superar" la situación que estamos viviendo. Si antes de caer esa situación cultivamos la oración y nuestro mundo interior, es mas difícil que caigamos tan fácil en las tentaciones.
Lo más difícil en momentos de crisis es confiar en Dios, sin embargo en esos momentos a veces la única opción es esa, es como sentir que estamos al borde un abismo donde no tengo de donde agarrarme y es allí donde pienso bueno, solo me queda confiar. pasar por esa situación es dura pero altamente enriquecedora porque precisamente es allí donde te das cuenta que Dios nunca te ha abandonado, y que se si lo dejas guía tu vida poco a poco hacia el camino mas indicado. El ser humano normalmente necesita tener "pisos" o estabilidad para sentir que tiene control y por ende seguridad, precisamente cuando se siente que no se tiene esa estabilidad es cuando aparecen pensamientos erróneos de la realidad que muchas veces llevan a tomar decisiones que no son las indicadas y que pueden atentar contra la dignidad humana, siendo esclavos de las circunstancias y no consecuentes con nuestros principios. Hoy domingo día del Señor pregúntate, eres esclavo de tus pensamientos, de las circunstancias? o confías y te abandonas en Dios? ¿hay alguna situación, persona o cosa que atenta contra tu dignidad actualmente y no haz podido soltar o alejarte de eso? ¿estas cultivando la relación con Dios? ...¿Qué vas hacer hoy para abandonarte mas en Dios? Proponte dejar, soltar aquello que hoy te aleja de tu encuentro sano con Dios, con el prójimo y por ende contigo mismo.
¡Gracias! 15 personas oraron
"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6