DÍA SEXTO: La Obediencia según Santa María Magdalena de Pazzi

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+Señal de la Cruz...

Acto de Contrición


BREVE MEDITACIÓN

«Se humilló, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de Cruz» (Flp II, 8).


A imitación de Nuestro Señor y como la Santa Madre Iglesia lo manda, debemos tener cuidado de no desobedecer y seguir el ejemplo de los revolucionarios.

Santa María Magdalena de Pazzi, la Carmelita florentina dicta en sus Avisos y Enseñanzas:

Vuestra obediencia sea alegre, humilde, sencilla, pronta y perseverante, pensando que es la Voz de Dios que os manda por medio de los superiores, considerándoos indignos que os sea impuesta, así como de poder cumplirla; y obedeciendo siempre que no haya ofensa a Dios y perjuicio del alma.


Consideraos como muertos a vosotros mismos; sepultad el juicio y la opinión propia.


El alma que quiere conseguir la perfección necesita, entre otras cosas, conocer y apartar los obstáculos que le impiden llegar a ella, los cuales son especialmente tres: el amor a las criaturas, y mucho más el amor propio; el disimulo, o sea, pensar una cosa y decir otra; y la desobediencia a Dios y a los superiores.


Nuestra Santa fue tan sumisa y obediente, que se sometió a los sufrimientos que Dios le envíaba, sin rogar para que se los quitara o aliviara. Inmóvil en su cama con un dolor indescriptible, decía: 

«Siempre sufrir y nunca morir»


Roguemos a la Santísima Virgen, que nos conceda la obediencia a nuestros superiores, sobretodo a nuestros directores espirituales.


ORACIÓN A LA BEATÍSIMA VIRGEN DEL MONTE CARMELO

¡Oh piadosísima Virgen! Vos, que nueve siglos antes de existir fuisteis vista en profecía por el Siervo de Dios nuestro Padre San Elías, y venerada por sus hijos allá en el Carmelo. Vos, que en carne mortal os dignasteis visitarles y les dispensasteis celestiales consuelos. Vos, que vigiláis siempre por la virtuosa familia que tuvo por Superior a vuestro estimado hijo San Simón Stock, por padres y reformadores a la Seráfica Virgen y Mística Doctora Santa Teresa de Jesús y al Esclarecido y Extático San Juan de la Cruz, así como por una de sus dignísimas hijas a la ejemplar Esposa de Jesucristo Santa María Magdalena de Pazzi, vuestra devotísima sierva. Vos, que engalanasteis a dicha Orden con la estimable prenda del Santo Escapulario, y, en fin, Vos, que de tantas maneras habéis demostrado vuestro cariñoso amor a los carmelitas y sus allegados, recibid benévola mi corazón ardiente de fervoroso entusiasmo hacia la más pura de las criaturas y la más candorosa de las madres. No permitáis, Señora, que el león rugiente asuste mi espíritu en el camino de la perfección, y haced que logre arribar a salvamento en la gloria, como lo habéis alcanzado de vuestro Divino Jesús para los que, invocándoos con fe e imitando vuestras virtudes, murieron píamente con vuestra enseña. Amén.

Ave María (3 veces)

Oración de la comunidad

Ave María

Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita Tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.