Pentecostés: 9 días invocando la Venida del Espíritu Santo

9 días para invocar al Espíritu Santo, nuestro Defensor y Consolador, a través de la Sagrada Escritura y de textos de los grandes Santos, tan necesitada de ser transformada por su presencia.

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Nueve días invocando al Espíritu Santo, nuestro ayudador y consolador, para conocerlo mejor, amarlo más y disponernos a ser tierra buena para que tome posesión de nosotros, y nos convierta en fieles testigos de Jesús.

¿Por qué hacer una novena al Espíritu Santo?

La novena al Espíritu Santo fue instituida por el propio Jesucristo, quien antes de ascender al cielo, mandó a sus discípulos que permanecieran en oración hasta ser bautizados por el Espíritu Santo. Él les fortalecería y les capacitaría para ser sus testigos hasta los confines de la tierra. Sus promesas se cumplieron el día de Pentecostés. Cada día de la novena se suplica al Espíritu Santo que realice de nuevo las maravillas que obró en la Iglesia naciente.

¿Para qué invocamos al Espíritu Santo?

Dejemos al Espíritu Santo actuar en nosotros para que seamos santos, para que nos tome de la mano y del corazón, y nos conduzca  a la casa del Padre.

Cuanto más invocamos al Espíritu Santo, más deseo tendremos de Él, más abiertos estaremos a recibirlo. Él es el Defensor que a petición de Jesús el Padre nos dará y nunca nos abandonará. Él nos transformará, para que como Jesús cumplamos la voluntad del Padre. En los sufrimientos Él será el Consolador, en la incertidumbre nos enseñará la verdad. Él será el Maestro que nos ayudará a orar según el querer de Dios de modo que demos fruto abundante y este permanezca. Dejemos actuar al Espíritu Santo en nosotros para que nos haga Santos.

¡Recemos esta novena y pidamos al Espíritu Santo que renueve en nosotros la plenitud de sus dones.

Si te unes cada día podrás: 

🕊️Conocer como el Espíritu se nos revela a través de la Sagrada Escritura, a invocarlo con la liturgia de la solemnidad de Pentecostés.

🕊️Ser iluminado por el testimonio que nos ofrecen los grandes Santos para secundar mejor la acción del Espíritu Santo en ti.

Programa de la novena

  • Día 1: El conocimiento del Señor llenará toda la tierra
    san Juan de Ávila y Sta. Teresa de Jesús
  • Día 2: Para Dios no hay nada imposible
     san Agustín y san Juan de la Cruz
  • Día 3: Este es mi Hijo amado
    Sta Magdalena de Pazzi y san Francisco de Asís 
  • Día 4: ¡El que tenga sed, venga a mí! 
    San Juan M. Vianney y Bto. M. Eugenio del Niño Jesús 
  • Día 5: El Padre ... enviará otro defensor, el Espíritu de la verdad
    San Gregorio Magno y Sta. María de Jesús Crucificado
  • Día 6: El Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad
    San Bernardo de Claraval y Bto. F. Palau y Quer
  • Día 7: El Espíritu nos hace hijos de Dios
    Sta. Catalina de Siena y Sta. Teresa de los Andes
  • Día 8: 8: Del Espíritu Santo recibiremos la fuerza para ser testigos
    Sta. Teresa Benedicta de la cruz y Sta. Teresa del Niño Jesús
  • Día 9: Todos fueron llenos del Espíritu Santo
    San Juan Pablo II y san Pablo VI

🕊️🕊️🕊️¡Pidamos juntos al Espíritu Santo, que se derrame en nuestros corazones y llene todos los aspectos de nuestra vida, para ayudarnos a cumplir siempre, con más profundidad y amor la Voluntad del Padre!🕊️🕊️🕊️

Sobre la autora de la novena

Por María Pilar Vila, doctora en Teología, laica de Barcelona, España.

- Puedes encontrar mas novenas, articulos para profundizar en la espiritualidad del Carmelo en su sitio web disponible en este enlace: 

https://carmeloteresajuan.wordpress.com/devocionario-con-textos-biblicos-liturgicos-santos-del-carmelo/ 
-También puedes consultar su otro sitio web sobre la espiritualidad en las diversas formas de vida en la Iglesia:

  https://laiglesiapueblodedios.wordpress.com/

La Orden de carmelitas descalzos seglares

Para conocer mejor el carisma del carmelita descalzo seglar puedes consultar:

https://ocds-es.wixsite.com/ocds/

Oración de la novena

Consagración al Espíritu Santo

Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os digneis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón. Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones. ¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén