Filipenses

Muchas de las cartas escritas por el apóstol Pablo, y que se encuentran en el Nuevo Testamento, fueron escritas mientras estaba en prisión, tal es el caso de la epístola a los Filipenses que se escribió en Roma, hacia el año 61.
Te invitamos a descubrir esta epístola de Pablo que nos llama a tener alegría en medio de las pruebas.

El apóstol Pablo se dirige a los filipenses

Esta carta es la respuesta de Pablo al regalo económico que recibió de la iglesia de Filipos por medio de Epafrodito. Y, aunque estaba en la cárcel, esto no le impidió expresar su gratitud y amor a Dios, ni tampoco seguir animando a los cristianos a permanecer unidos en la humildad. Además, Pablo también les motivó a seguir anunciando a Cristo con alegría y confianza, especialmente en medio de los tiempos de persecución que vivían. 

6 hermosos pasajes de Filipenses

Filipenses 1

“Porque para mí la vida es Cristo, y la muerte, una ganancia” (Filipenses 1:21).

Filipenses 2

“Que cada uno busque no solamente su propio interés, sino también el de los demás. Tengan los mismos sentimientos de Cristo Jesús. El, que era de condición divina, no consideró esta igualdad con Dios como algo que debía guardar celosamente: al contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de servidor y haciéndose semejante a los hombres. Y presentándose con aspecto humano, se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte y muerte de cruz” (Filipenses 2:4-8).

“Por eso, Dios lo exaltó y le dio el Nombre que está sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús, se doble toda rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y toda lengua proclame para gloria de Dios Padre: «Jesucristo es el Señor»” (Filipenses 2:9-11).

Filipenses 3

“Hermanos, yo no pretendo haberlo alcanzado. Digo solamente esto: olvidándome del camino recorrido, me lanzo hacia adelante y corro en dirección a la meta, para alcanzar el premio del llamado celestial que Dios me ha hecho en Cristo Jesús” (Filipenses 3:13-14).

Filipenses 4

“Yo sé vivir tanto en las privaciones como en la abundancia; estoy hecho absolutamente a todo, a la saciedad como al hambre, a tener sobra como a no tener nada. Yo lo puedo todo en aquel que me conforta” (Filipenses 4:12-13).

“Dios colmará con magnificencia todas las necesidades de ustedes, conforme a su riqueza, en Cristo Jesús” (Filipenses 4:19).

(Te invitamos a descubrir a continuación otros versículos comentados de esta carta de Pablo: Filipenses 4:6; ...)

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