Los tres ciegos

Queridos amigos:

 “Advirtiendo , pues, el alma que en este negocio es Dios el principal agente y el mozo de ciego que la ha de guiar por la mano a donde ella no sabría ir, que es a las cosas sobrenaturales, que no puede su entendimiento ni voluntad ni memoria saber cómo son: todo su principal cuidado ha de se mirar que no ponga obstáculo al que la guía según el camino que Dios le tiene ordenado en perfección de la ley de Dios y la fe, como decimos. Y este impedimento le puede venir si se deja guiar y llevar de otro ciego. Y los ciegos que la podrían sacar del camino son tres, conviene a saber: el maestro espiritual, y el demonio y ella misma.”  Llama de Amor viva canción 3 verso 3 punto 29.

En nuestro dejarnos hacer por Dios y en este camino de purificación activa y pasiva hasta llegar a la consumación en el matrimonio espiritual encontramos sin duda muchos obstáculos. San Juan de la Cruz habla de los tres ciegos. El primer ciego que es el maestro espiritual ya lo tratamos en otras publicaciones y seguiremos hablando de ello. Hoy me quería detener en el segundo ciego que es el demonio.

Dice así San Juan de la Cruz:

"El segundo ciego que dijimos que podría empachar al alma en este género de recogimiento es el demonio que quiere que, como él es ciego, también el alma lo sea. El cual en estas altísimas soledades, en que se infunden las delicadas unciones del Espíritu Santo (en lo cual él tiene grave pesar y envidia, porque ve que no solamente se enriquece el alma, sino que se le va de vuelo y no la puede coger en nada, por cuanto está el alma sola, desnuda y ajena de toda criatura y rastro de ella…" Llama de Amor viva Canción 3 verso 3 punto 63.

Por eso a medida que la persona va adentrándose en la profundidad de Dios, también el demonio la acecha porque sabe que si llega a la unión con Dios ya no podrá hacer nada con ella y además porque sabe que estas almas que llegan a estas alturas llevan muchas almas a Dios.

Esta semana escuché una charla del papa Francisco donde se explica muy bien como distinguir la voz de Dios y la voz del demonio. Espero que os guste. Y como siempre también espero vuestros comentarios.

¡Hasta la próxima semana!

 

Oración de la comunidad

Jesús tu nombre me sana

Jesús, repito tu dulce Nombre, tranquilamente, empiezo a descansar en Ti, confío en Ti. Jesús, Tu sabes que estoy lleno de preocupaciones. Respiro suavemente , repito tu dulce Nombre y pongo todo el peso de mis ansiedades en tu hombro divino. Y ahora apoyo mi rostro en tu regazo y me dejo acariciar por tu mano dulce que me da tanta seguridad. Oigo tu voz suave que me dice que nada tema que Tú estás aquí conmigo. Jesús, Jesús, Jesús...

¡Gracias! 202 personas oraron

8 comentarios

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

Sanación interior con San Juan de la Cruz y otros místicos

Me inscribo