Nosotros nos quedamos

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El padre Juan Núñez es un misionero comboniano que trabaja actualmente en la misión de Gilges Beles, en Etiopía. En este rincón de África, gracias a Dios, no ha llegado ‘todavía' la tristemente famosa pandemia de la COVID-19 y las medidas gubernativas de aislamiento no son tan draconianas como lo han sido en Europa y lo siguen siendo en algunos lugares del planeta. Sin embargo toda la vida está condicionada por el virus, como espada de Damocles que pende amenazadora sin saber cuando mostrará su filo penetrante.

Junto a Juan hay dos jóvenes laicos misioneros combonianos, uno español, David ,y el otro portugués, Pedro (en la foto). Llegaron hace un año y como nos cuenta Juan…

…venían llenos de ilusión por hacer muchas cosas en favor de los demás. Se dieron sin medida en servicios como la enseñanza de todo aquello que eran capaces de enseñar, las visitas a los poblados, llevar al centro de salud a los enfermos que caían en su camino…Trabajaban a destajo para disfrutar al máximo el breve período de dos años de su permanencia. Luego, inesperadamente, en mitad de la faena, por así decirlo, llegó el coronavirus. Muchas organizaciones llamaron a sus miembros a volver a la nación de origen. También ellos fueron llamados. Si se quedaban, era bajo su responsabilidad. Y ellos no dudaron en la elección: se quedaban “bajo su propia responsabilidad”, incluso cuando la madre de uno de ellos está pendiente de una delicada operación de cáncer e incluso cuando ellos mismos están aquejados de continuos ataques de tifus y fiebre tifoidea, que los debilitan…

Y ahí siguen a pesar de todas las limitaciones actuales. Como ‘buenos' misioneros' se han encariñado de la gente y aunque no puedan hacer muchas cosas, sienten que su simple presencia en estos momentos de tribulación es un valor que justifica haber venido.

Por intercesión de San Daniel Comboni, oramos por David, Pedro, Juan y sus compañeros y compañeras de misión. Que el Señor les de mucha energía y fe para que su presencia en Gilges Beles sea buena noticia para todas las gentes que allí habitan.

Oración de la comunidad

Oración por las misiones y las vocaciones

¡Oh Padre!, tú quieres que todos los pueblos alcancen la salvación; despierta, pues, en todo creyente un nuevo fervor misionero, para que Cristo sea testimoniado y anunciado a los que aún no le conocen. Por intercesión de San Daniel Comboni sostén y alienta a los misioneros en su obra evangelizadora y sigue suscitando nuevas vocaciones para las misiones. Virgen María, Reina de los Apóstoles, que has ofrecido el Verbo encarnado al mundo, dirige la humanidad hacia Aquel que es la luz verdadera que ilumina a todo viviente, y haz de nosotros unos fervientes colaboradores suyos. Por Cristo nuestro Señor. Amen.

¡Gracias! 26 personas oraron

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"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

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