Evangelio según San Marcos 8,11-13.
Entonces llegaron los fariseos, que comenzaron a discutir con él; y, para ponerlo a prueba, le pedían un signo del cielo.
Jesús, suspirando profundamente, dijo: "¿Por qué esta generación pide un signo? Les aseguro que no se le dará ningún signo".
Y dejándolos, volvió a embarcarse hacia la otra orilla.
Comentario del Evangelio
San [Padre] Pío de Pietrelcina (1887-1968), capuchino
OP; GF 174; Ep 4,418
El Espíritu Santo nos dice: No dejéis que vuestro espíritu sucumba a la tentación ni a la tristeza porque el gozo del corazón es la vida del alma. La tristeza no sirve para nada y causa nuestra muerte espiritual.
Sucede a veces que las tinieblas de la prueba abaten el cielo de vuestra alma, pero ¡ellas son luz! Es gracias a ellas que creéis aun en la oscuridad; el espíritu se siente perdido, teme no ver ya nunca más, de no comprender ya nunca más. Pero ese es el momento en que el Señor habla y se hace presente al alma; y ésta escucha, comprende y ama en el temor de Dios. Para "ver" a Dios, no esperéis llegar al Tabor (Mt 17,1) siendo así que lo contempláis ya en el Sinaí (Ex 24,18).
Progresad con el gozo de un corazón sincero y totalmente abierto. Y si no os es posible conservar esta alegría, cuando menos no perdáis la valentía y mantened toda vuestra confianza en Dios.
¡Gracias! 136 personas oraron
3 comentarios
"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6