La voz de la alabanza

¡Tú eres el único Santo, Señor Dios, tú que haces maravillas! Tú eres belleza, tú eres dulzura, tú eres nuestro refugio, nuestro guardián y nuestro defensor, tú eres la fuerza, tú eres la frescura. ¡Tú eres nuestra esperanza, tú eres nuestra fe, tú eres nuestro amor, tú eres nuestra gran dulzura, tú eres nuestra vida eterna, grande y admirable Señor, Dios todopoderoso, oh buen Salvador! Alabanzas a Dios por San Francisco

Meditación

¡Tú eres el único Santo, Señor Dios, tú que haces maravillas! San Francisco quería que sus Hermanos fuesen hombres de alabanza… Pero, no nos equivoquemos sobre esta alabanza que marcó a San Francisco a lo largo de toda su vida. No olvidemos que el que desciende del Alverno, marcado con los signos de la Pasión del Señor, fue desde el primer día de su conversión el Amante del crucificado. Su vida quedará marcada por el sello del Espíritu, ahí donde nace, cual flor, la alabanza de un corazón reconciliado y pacificado.

En San Francisco la alabanza nace en el corazón de la noche. Enfermo, sin fuerzas en la cabaña de San Damián, implora a su Dios para que se apiade de él y en la oscura noche desciende en su corazón la alabanza del Cántico del Hermano Sol. La alabanza se convertía en canto maravillado ante la creación, canto de la Fraternidad, canto del Hombre reconciliado con su historia personal, con la historia del mundo, con Dios. Su canto de alabanza se une al de los tres niños en la hoguera (Daniel 3) o al de Moisés al borde del Mar Rojo (Éxodo 15, 1-13-18) ¿y quizás al nuestro después de la travesía de la noche de nuestras pruebas?

Sor Myriam-Madeleine, monja clarisa - Poligny

Propósito para el día :

En nuestro mundo marcado por el miedo, la violencia, los traumatismos de toda clase, ¿cómo dejar que la alabanza habite en nuestras vidas? ¿Cómo puede eclosionar cual flor después de la tormenta? La mirada de Jesús en la cruz puede ayudarte a dejar brotar la alabanza en el transcurso de tu vida.

Intención :

Dios Creador, permítenos abrir los ojos sobre las cosas hermosas que nos rodean, en las personas, la naturaleza, los gestos, lo compartido… Para que nuestros corazones canten tu alabanza.

Oración de la comunidad

Oración

Dios altísimo y gloriosísimo, ven a iluminar las tinieblas de mi corazón ; concédeme una fe recta, una esperanza sólida y una perfecta caridad ; concédeme sentir y conocer, para que pueda cumplirla, tu voluntad santa que no puede hacerme errar. Amén. San Francisco

¡Gracias! 65 personas oraron

2 comentarios

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

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