¡Les damos la bienvenida!

Este itinerario se derrollará en 3 tiempos: 

• Una meditación de audio - para hacer por ejemplo, en la mañana o en un momento de la jornada que nos sea favorable.
• Unas cortas reflexiones escritas para meditar durante el día. 
• ¡Una acción cotidiana que nos llenará!

Meditemos 🎧

¡Tu acción del día! 🌞

Acaso no se puede en este día, así como en otros días de cuaresma, el repetir, suave y sosegadamente una pequeña oración a lo largo del día.
Puede ser: “Señor, ten misericordia de mí”, o “Jesús, ayúdame a conocerte y a hacer tu voluntad”. También puede usar sus propias palabras.

Reflexiones 📃

Comienza la Cuaresma, un tiempo para hacer un alto en el camino, un tiempo de oración, ayuno y limosna. La ceniza es el reconocimiento de nuestra propia condición humana, tan limitada. Es una llamada a poner nuestra atención no en nosotros mismos, sino en Jesucristo. Como no lo recuerda, cada año, el miércoles de ceniza. Es llamada a la conversión de nuestros corazones para que nuestra vida esté más cerca de lo que Jesús quiere de nosotros.  Jesús por medio de sus palabras, nos enseña el camino para que no nos perdamos en cosas inútiles.

Cuando ores, no seas como los hipócritas, porque a ellos les encanta orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para que la gente los vea, de cierto les digo que con eso ya se han ganado su recompensa. Pero tu cuando ores, entra en tu aposento, y con la puerta cerrada ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará. (Mt 6, 5-6).

Señor, que me sienta llamado a sentir este tiempo para renovarme como tú quieres

Quiero preparar el lugar, el momento adecuado para ponerme en tu presencia. Soy consciente, Señor, que seguramente me encuentres con las mismas dudas y problemas del año pasado y que siempre encuentro mil excusas para no ponerme a rezar. El camino no es fácil, sin embargo, tu sales a mi encuentro cuando estoy mal y por eso quiero recuperar las ganas de estar junto a ti. Eres necesario, vital e importante en mi vida.

Como Jesús me quiero retirar a orar, a buscar la voluntad de Dios en mi vida, y ahora es un tiempo favorable, es un tiempo de silencio, de entrar en mí y encontrarme Contigo.

¿Cómo es mi oración?, ¿qué puedo hacer para acercarme más en este tiempo de Cuaresma a la palabra de Dios? Quizás leer el Evangelio de cada día. El camino es largo, Señor, hasta la Pascua pero contigo a mi lado todo será más fácil y llevadero.

San Pablo nos motiva a que “oremos sin cesar”. Toda nuestra vida puede ser una oración si elevamos nuestra mente y corazón a Dios en cada momento y acción de nuestra vida. Lo central de la Cuaresma es que oremos lo más frecuente y profundamente que podamos.