Oraciones por la paz

La oración es un arma que tenemos los cristianos para combatir las fuerzas del mal. De hecho, como hijos e hijas de Dios, estamos invitados a interceder, es decir, a pedirle al Señor por su ayuda, ante los conflictos, las guerras y la discordia existentes en el mundo.

A continuación, te proponemos una serie de oraciones por la paz, hechas por santos y santas del Señor, para pedirle por su misericordia hacia la humanidad.

Oración por la paz del Papa Juan Pablo II

“Oh, Dios, Creador del universo,
 
que extiendes tu preocupación paternal sobre cada criatura
 y que guías los eventos de la historia a la meta de la salvación;
 nosotros reconocemos tu amor paternal
 que a pesar de la resistencia de la humanidad
 y, en un mundo dividido por la disputa y la discordia,

Tú nos haces preparar para la reconciliación.
 
Renueva en nosotros las maravillas de tu misericordia;
 envía tu Espíritu sobre nosotros,
 para que él pueda obrar en la intimidad de nuestros corazones;
 para que los enemigos puedan empezar a dialogar;
 para que los adversarios puedan extrecharse las manos;
 y para que las personas puedan encontrar entre sí la armonía.

Para que todos puedan comprometerse en la búsqueda sincera
 
por la verdadera paz; para que se eliminen todas las disputas,
 para que la caridad supere el odio,
 para que el perdón venza el deseo de venganza”.

(Día Mundial por la Paz, 1 de enero del 2002)

Oración por la paz del Beato Juan XXIII

“Señor Jesucristo, que eres llamado Príncipe de la Paz,

que eres Tú mismo nuestra paz y reconciliación,

que tan a menudo dijiste: "La Paz contigo, la paz les doy."

Haz que todos hombres y mujeres den testimonio

de la verdad, de la justicia y del amor fraternal.

Destierra de nuestros corazones cualquier cosa

que podría poner en peligro la paz.

Ilumina a nuestros gobernantes

para que ellos pueden garantizar

y puedan defender el gran regalo de la paz.

Que todas las personas de la tierra

se sientan hermanos y hermanas.

Que el anhelo por la paz se haga presente

y perdure por encima de cualquier situación”.

Oración por la paz de San Francisco de Asís

“Señor,

házme un instrumento de tu paz:

donde haya odio, ponga yo amor,

donde haya ofensa, ponga yo perdón,

donde haya discordia, ponga yo armonía,

donde hay error, ponga yo verdad,

donde haya duda, ponga yo la fe,

donde haya desesperación, ponga yo esperanza,

donde haya tinieblas, ponga yo la luz,

donde haya tristeza, ponga yo alegría.

Oh, Señor, que no me empeñe tanto

en ser consolado como en consolar,

en ser comprendido, como en comprender,

en ser amado, como en amar;

porque dando se recibe, olvidando se encuentra,

perdonando se es perdonado,

muriendo se resucita a la vida .

Amén”.