¡Oremos para que todos las figuras paternales se colmen de virtudes!

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Hoy es el día del Padre, y hemos llegado al término de nuestra novena para que imiten las virtudes de San José.

Desde que soy padre, pienso a menudo en esta frase de mi madrina: “lo que piensas que les debes a tus padres, dáselo a tus hijos.” Nuestros padres terrestres son nuestra riqueza, nos abren siempre un extremo del camino que nos lleva, desde aquí abajo, hacia nuestro Padre celestial.  Ser padre, significa ser digno de la misma confianza que le fue concedida a San José.

Como regalo, te doy esta hermosa oración dirigida a nuestro Padre del Cielo como una alabanza por nuestros padres de la tierra ¡y sigamos rezando por todos los padres para que estén siempre a la altura de este designio divino!


Señor,

En este día de fiesta y de alegría, queremos darte gracias,

Decirte ¡gracias por nuestros padres!

Los que todavía están con nosotros y los que han vuelto a tí.

Sí, Señor, gracias por nuestros padres que, en el seno de la familia, tienen un papel importante.

Que por su atención y su devoción cotidiana, es tu amor el que se nos presenta.

Por su alegría de vivir, es tu alegría la que viene a nosotros.

Por sus palabras de ánimo, es tu voz la que oímos.

Gracias Señor por los padres, los abuelos, los tíos, los hijos, nietos y los futuros padres.

Demuéstrales tu bondad haciéndoles vivir hoy

¡el más hermoso de los días!

¡Amén!

Fuente: www.jardinierdedieu.com


Acción concreta: Hoy dedicaré tiempo para mi padre terrenal: puedo escribirle una carta (¡¡un email no cuenta!!) o llamarle por teléfono (¡no¡ ¡no se vale un mensaje de texto!) o sino, algo que suena mucho mejor, voy a visitarle, ya sea que este todavía presente aquí en la tierra o que ya este disfrutando de la gloria celestial, meditaré acerca de como mi percepcion hacia él ha cambiado durante y después de esta novena.

Prière de la communauté

¡Salutation!

Dios te salve José Dios te salve José, que la gracia divina ha colmado. El Salvador ha descansado en tus brazos y crecido bajo tus ojos. Bendito tú eres entre todos los hombres y bendito es Jesús, el divino hijo de tu virginal esposa. San José, dado por padre al Hijo de Dios, reza por nosotros en nuestros problemas de familia, de salud y de trabajo hasta nuestros últimos días y socórrenos a la hora de nuestra muerte. ¡Amén!

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1 commentaire

Que vos paroles soient toujours bienveillantes, qu’elles ne manquent pas de sel, vous saurez ainsi répondre à chacun comme il faut. Col 4 : 6

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¡Oremos para que los padres imiten a San José!

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