María Teresa Claro es una madre de familia, que padeció de cáncer y actualmente trabaja como profesora de arte. A partir de su experiencia de superación, nos enseña a ver el sufrimiento como un camino hacia la felicidad. Nos enseña una nueva perspectiva sobre el dolor y la muerte, sobre cómo afrontarla, como superarla y especialmente cómo quererla.

Los invitamos a reflexionar:

“Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame” (Mt 16,24)

¡Qué impresionante la fuerza que tiene la Tere para sobrellevar una dificultad!. Muchas veces nos pasa que cuando estamos viviendo un momento difícil en nuestras vidas, nos encerramos y tratamos de resolver nuestros problemas solos, y la verdad, es que no estamos solos. Dios está con nosotros todo el tiempo, nos acompaña, y tenemos que confiar en Él. La Tere fue capaz, en medio del dolor, de darse cuenta de que Cristo le quería enseñar algo con esto, de que no sería fácil, pero que se podía salir adelante; de esta manera solo necesitó confiar en Él.

No siempre va a ser fácil, pero hay que ser constantes, porque nosotros hemos venido a este mundo por algo mucho más trascendental que solamente por nuestros planes, venimos a ser una herramienta del plan de Dios. Tal como dijo la Tere, si hay alguien que realmente nos quiere felices es Él.

¿Hago lo mismo que la Tere cuando estoy pasando por un momento de dificultad?

En los momentos de dificultad, ¿me apoyo y confío en Dios?

¿Soy capaz de reconocer a la muerte y apegarme a ella?

A  veces el dolor da miedo porque deja heridas en el alma y el corazón y te hace caer al suelo. Pero esto ya es parte de la vida, y lo más importante será no permanecer en el suelo, es decir, sanar las heridas y  dejarse levantar. Por eso los invitamos a confiar y apoyarse en Dios, para así levantarse y superar todo lo que se les cruce en el camino.

“Tener Fe no significa que no vamos a tener dificultades en la vida, si no que somos capaces de afrontarlas sabiendo que no estamos solos.” Papa Francisco.