Año Comboniano de Formación Permanente

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Este mes de junio se clausuró la 19 edición del Año Comboniano de Formación Permanente, un curso que tiene lugar cada dos años en la Casa General de los Misioneros Combonianos en Roma. En esta edición han participado 14 misioneros de 10 nacionalidades diferentes (6 latinoamericanos, 5 africanos, 3 europeos), acompañados por tres formadores (los Padres Elias Sindjalim Essognimam, Fermo Bernasconi y Siro Stocchetti).

El curso, de 8 meses de duración, está dirigido a misioneros de entre 40 y 50 años que han realizado un tiempo de servicio misionero de más de 10 años. Es un momento de recogimiento, lejos del activismo al que a veces conduce la misión, que permite a los misioneros hacer una síntesis de la propia experiencia de vida a la escucha de la Palabra de Dios y de nuestro fundador, San Daniel Comboni. Los misioneros tienen también la oportunidad de participan en un mes ignaciano de ejercicios espirituales.

Este año el estado de alarma a causa de la COVID-19 ha condicionado alguna de las actividades propuestas, pero el curso ha podido llegar a buen término. Los 14 misioneros regresan de nuevo a la actividad misionera renovados espiritualmente y plenos de entusiasmo.

Por intercesión de San Daniel Comboni, oremos por los 14 misioneros combonianos que acaban de concluir el Año Comboniano de Formación Permanente, para que su inserción en la misión que les será asignada se produzca sin sobresaltos y puedan dar abundantes frutos apostólicos.

Oración de la comunidad

Oración por las misiones y las vocaciones

¡Oh Padre!, tú quieres que todos los pueblos alcancen la salvación; despierta, pues, en todo creyente un nuevo fervor misionero, para que Cristo sea testimoniado y anunciado a los que aún no le conocen. Por intercesión de San Daniel Comboni sostén y alienta a los misioneros en su obra evangelizadora y sigue suscitando nuevas vocaciones para las misiones. Virgen María, Reina de los Apóstoles, que has ofrecido el Verbo encarnado al mundo, dirige la humanidad hacia Aquel que es la luz verdadera que ilumina a todo viviente, y haz de nosotros unos fervientes colaboradores suyos. Por Cristo nuestro Señor. Amen.

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"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

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