DÍA SÉPTIMO

Imagen principal de la publicación

 Por la Señal...
Señor mío, Jesucristo...


ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

Dios te salve, María, llena de gracia y bendita más que todas las mujeres, Virgen singular, Virgen soberana y perfecta, elegida por Madre de Dios y preservada por ello de toda culpa desde el primer instante de tu Concepción: así como por Eva nos vino la muerte, así nos viene la vida por ti, que por la gracia de Dios has sido elegida para ser Madre del nuevo pueblo que Jesucristo ha formado con su sangre.

A ti, purísima Madre, restauradora del caído linaje de Adán y Eva, venimos confiados y suplicantes en esta novena, para rogarte que nos concedas la gracia de ser verdaderos hijos tuyos y de tu Hijo Jesucristo, libres de toda mancha de pecado.

Acordaos, Virgen Santísima, que habéis sido hecha Madre de Dios, no sólo para vuestra dignidad y gloría, sino también para salvación nuestra y provecho de todo el género humano. Acordaos que jamás se ha oído decir que uno solo de cuantos han acudido a vuestra protección e implorado vuestro socorro, haya sido desamparado. No me dejéis, pues, a mi tampoco, porque si me dejáis me perderé; que yo tampoco quiero dejaros a vos, antes bien, cada día quiero crecer más en vuestra verdadera devoción.

Y alcanzadme principalmente estas tres gracias: la primera, no cometer jamás pecado mortal; la segunda, un grande aprecio de la virtud cristiana, y la tercera, una buena muerte. Además, dadme la gracia particular que os pido en esta novena (hacer aquí la petición que se desea obtener).


ORACIÓN DE ESTE DÍA

Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y Benignísimo Redentor nuestro: así como diste a María, entre las demás virtudes, una pureza y castidad eximia, por la cual es llamada Virgen de las vírgenes, así Te suplicamos, por intercesión de Tu Madre Inmaculada, nos concedas la dificilísima virtud de la castidad, que tantos han conservado mediante la devoción de la Virgen y Tu protección.

Meditar y rezar las oraciones finales.


ORACIONES FINALES

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. A ti, celestial Princesa, Virgen sagrada María, te ofrezco en este día alma, vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía. Rezar tres Ave Marías.

Tu Inmaculada Concepción, oh Virgen Madre de Dios, anunció alegría al universo mundo.

Oremos: Oh Dios mío, que por la Inmaculada Concepción de la Virgen, preparaste digna habitación a Tu Hijo: te rogamos que, así como por la previsión de la Muerte de Tu Hijo libraste a ella de toda mancha, así a nosotros nos concedas por su intercesión llegar a Ti limpios de pecado. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor. Amén.


Ave María,
grátia plena,
Dóminus tecum,
Benedícta Tu in muliéribus,
et Benedíctus fructus ventris tui IESUS.

Sancta María, Mater Dei,

ora pro nobis peccatóribus,
nunc et in hora mortis nostrae.
Amen.

Oración de la comunidad

Tota pulchra es, María!

¡Eres toda Pura, María! y el pecado original no está en Ti. Tú, la gloria de Jerusalén, Tú, alegría de Israel. Tú, honor de nuestro pueblo. Tú abogada de los pecadores. ¡Oh! María, Virgen prudentísima, Madre clementísima. Ruega por nosotros. Intercede por nosotros, ante Nuestro Señor Jesucristo. Tota pulchra es, María! Et mácula originális non est in te. Tu, glória Ierúsalem. Tu, lætítia Israël. Tu, honorificéntia pópuli nostri. Tu, advocáta peccatórum. O María! Virgo prudentíssima! Mater clementíssima! Ora pro nobis. Intercéde pro nobis ad Dóminum Iesum Christum. (Himno cristiano del siglo IV. El texto está tomado en parte del libro de Judith y en parte del Cantar de los Cantares)

¡Gracias! 17 personas oraron

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

Novena de la Inmaculada Concepción

Me inscribo