Que precioso el evangelio de hoy... El salir a la búsqueda de Jesús, como María y sus hermanos.

Cuántas necesidad tenemos de Jesús, que no podemos dejar de salir a su encuentro, en el santísimo, en la eucaristía, en el prójimo... Que bello es encontrarnos con él, con ayuda del espíritu santo que nos guía en el camino.

Pero qué parte preciosa, donde Jesús nos hermana a él, nos hace parte de su familia, como cristianos que escuchamos la palabra de Dios y la ponemos en práctica a diario, que bello es sentirnos reconocidos por Jesús como hermanos y nos lleva a recordar el pasaje donde nos entrega a María como Madre, situación que refuerza el sentimiento de Jesús, el deseo, de que seamos sus hermanos.

Que el día de hoy, pidamos encontrar a nuestro hermano Jesús en cada situación de la vida cotidiana, en la oración y que podamos darnos a otro como ofrenda de Jesús al mundo.

Que nuestro señor, los hermane de forma especial, los bendiga en este hermoso día y los invite a seguir sirviendo.