Día 5- En el silencio de la oración

San Francisco de Asís intercambiaba con su Señor interminables coloquios; ahí rendía cuentas al Juez, suplicaba al Padre, se entretenía con el Amigo, jugaba con el Esposo: para componer una ofrenda múltiple con todas las fibras de su corazón, quería contemplar bajo múltiples aspectos a Aquél que es soberanamente simple y uno. No movía los labios; a menudo sólo hablaba su alma; parecía que había hecho pasar al interior de sí mismo todas sus facultades de atención para concentrarse sobre las realidades celestes. Cuando se concentraba de tal modo, con todo el ímpetu de su corazón, en morar “en la casa de Yahvé todos los días de su vida, la única gracia que pedía al Señor”, ya no era un hombre el que oraba, era la oración hecha hombre. – Segunda Vida de San Francisco de Tomás de Celano

💡Meditación:

San Francisco, seducido por Dios, intentaba encontrarlo, contemplando el AMOR que es Dios mismo, el Amor de un amigo, el Amor de un Esposo, el Amor de una Madre…  Y San Francisco buscaba responder a ese amor con todas sus capacidades para amar, ofreciendo al Señor todo su ser, en una relación de infinita confianza.

San Francisco nos enseña así un camino de oración:  [...] tomar tiempo “gratuito” para Dios, estar ante Él, “reconocer que sólo Él es el Todopoderoso”, “alegrarnos de que Dios sea Dios”, girar hacia Él todo nuestro ser, escucharlo.

Esto puede ser “mirando” con los ojos de nuestro corazón una escena bíblica, repitiendo una palabra, una frase del Evangelio, de un salmo, de una oración que nos dice “quién es Dios”

Tomar este tiempo gratuito que “no sirve para nada” al igual que no se cuenta el tiempo compartido con un amigo. Interesarnos primero por Él, por lo que Él es. 

No se trata primero de “hablar”, sino de estar ahí, disponibles, enfocados en Dios antes que en nosotros mismos, dispuestos a “dejarnos hacer por el Espíritu del Señor”, como recomendaba Francisco de Asís a sus hermanos. 

Y entonces poco a poco, Dios podrá transformar nuestra vida, nuestra manera de ser, de actuar, de entrar en relación con los demás. 

Hermana Brigitte Pollet, Franciscana Oblata del Sagrado Corazón, Nantes.

💡  Propósito del día:

A lo largo de todo el día, cada vez que empiezo una nueva actividad, tomaré un poco de tiempo para dirigirme al Señor y poner en sus manos todas mis actividades. 

¡Pedid y recibiréis!

💡  Intención:

Señor, concédenos el deseo de perseverar en la oración, sobre todo cuando nos parece árida y  nos sentimos áridos ante Ti, para que logremos encontrar en Ti toda su fecundidad. Señor, en este día te pedimos particularmente por todos aquellos que jamás rezan.

Oración de la comunidad

Oración de la festividad de San Francisco de Asís.

Dios, altísimo y gloriosísimo, ven a iluminar las tinieblas de mi corazón, dame una fe recta, una esperanza sólida, y una perfecta caridad. Concédeme sentir y conocer, tu Santa Voluntad para poder cumplirla por los siglos de los siglos. ¡Amén! – San Francisco

¡Gracias! 168 personas oraron

8 comentarios

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

9 días para una vida armoniosa con San Francisco de Asís

Me inscribo