II Domingo_Cuaresma Lucha y gloria nos son ofrecidas por Dios

II Domingo de cuaresma_C.pdf

Profundiza en este II domingo de Cuaresma de la mano de Mons. Juan Clá Díaz, fundador de los Heraldos del Evangelio. 


La vida del hombre transcurre en un valle de lágrimas, donde el sufrimiento siempre está presente. Para sustentarnos en medio de la lucha, Dios nos apunta, a través de gracias sensibles, el grandioso fin al que somos destinados.


I – Somos llamados “ad maiora”

II – Promesa, fe y lucha

III – Las consolaciones nos sustentan rumbo a la victoria final

Continúa leyendo en el archivo pdf. 







Oración de la comunidad

Oracio de la Restauración

Hay momentos, Madre mía, en que mi alma se siente, en lo que tiene de más profundo, tocada por una nostalgia inexpresable. Tengo nostalgia de la época en la que yo Os amaba y Vos me amabais en la atmósfera primaveral de mi vida espiritual. Tengo nostalgia de Vos, Señora, y del paraíso que ponía en mí la gran comunicación que yo tenía con Vos. ¿No tenéis también Vos nostalgia de ese tiempo? ¿No tenéis añoranzas de la bondad que había en aquel hijo que yo fui? Venid, pues, ¡Oh! la mejor de todas las Madres, y por amor a lo que florecía en mí, restauradme. Recomponed en mí el amor a Vos y haced de mí aquel hijo sin mancha que yo habría sido, si no fuese por tanta miseria. Dadme un corazón arrepentido y humillado, y haced lucir nuevamente ante mis ojos, aquello que con el esplendor de vuestra gracia, yo comenzara a amar tanto y tanto. Acordaos, Señora, de este David y de toda la dulzura que en él pusisteis. Así sea.

¡Gracias! 9 personas oraron

1 comentario

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

Comentario del Evangelio Dominical Heraldos del Evangelio

Me inscribo