"Elige la vida"

Imagen principal de la publicación

"Pongo delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige la vida, para que viváis tú y tu descendencia, amando al Señor, tu Dios, escuchando su voz, adhiriéndote a Él, pues Él es tu vida..." Dt 30, 19-20 

En el camino que estamos recorriendo en este tiempo de cuaresma y en toda nuestra vida tenemos la opción de elegir. Dios, que es un Padre bueno, quiere respetar la libertad de sus hijos. Su poder se limita en nuestra libertad. Por ello, nos deja elegir entre la vida o la muerte, la bendición o la maldición. 

Moisés nos recomienda hoy elegir la vida y nos da tres pistas de cómo hacerlo:

1. Amando al Señor, tu Dios

2. Escuchando su voz

3. Adhirieéndonos a Él que es la vida. 

Los cuarenta años que vivió el pueblo de Israel en el desierto le hicieron descubrir la importancia de esta invitación a la vida. No siempre fueron capaces de seguirla. En varios momentos dudaron del amor de Dios y se voltearon para adorar otros dioses. Esto no logró apagar el llamado a la vida. Dios estuvo siempre dispuesto a perdonarlos y a comenzar de nuevo. Lo único que tiene que hacer el pueblo es arrepentirse, volver al Señor en actitud de escucha, confiando en su misericordia. Se trata de aprender a caminar eligiendo la vida en lugar de la muerte, el bien en lugar del mal, la bendición en lugar de la maldición. 

También nosotros experimentamos ese contraste entre lo que nos lleva a la vida y lo que nos aleja de ella. En nuestras opciones de cada día podemos percibir algunas que nos acercan más a Dios y nos producen una paz y una alegría profundas. A partir de otras opciones, nos alejamos de la vida verdadera, puede haber una cierta alegría pasajera y placentera, pero en poco tiempo nos damos cuenta que terminamos tristes y vacíos.

En el Evangelio Jesús nos habla de una gran paradoja de la vida cristiana para seguirle: "perder- ganar": "El que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará". Vivir eligiendo la vida implica a veces negarnos a nosotros mismos y cargar con nuestra cruz de cada día. Nuestras tendencias se inclinan fácilmente por caminos de muerte y de egoísmo. Todos tenemos alguna cruz que cargar. La vida no es una línea recta, hay dificultades, frustraciones y dolores. La clave está en aprender a llevar nuestras cruces siguiendo a Jesús desde la libertad del amor, la libertad de una obediencia filial que se recupera poco a poco a imagen de la obediencia de Jesús al Padre.

Clave para el camino: Te puede ayudar tomar un tiempo para pedirle al Espíritu Santo que te muestre cuáles son las opciones que en tu día a día te acercan a la vida verdadera, y cuáles son las opciones que te alejan de ella. Pon todo esto en manos de Dios y pídele que te enseñe a poner tu confianza en Él y en sus caminos (como nos invita el salmo de hoy). Pídele al Espíritu la gracia de poner tu gozo en el Señor y de adherirte a Él en todo. 

DICHOSO EL HOMBRE QUE HA PUESTO SU CONFIANZA EN EL SEÑOR                                                                        Será como un árbol
plantado al borde de la acequia:
da fruto en su sazón
y no se marchitan sus hojas;
y cuanto emprende tiene buen fin.

 ¡BUEN CAMINO HACIA LA PASCUA!

Oración de la comunidad

Padre nuestro

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

¡Gracias! 394 personas oraron

19 comentarios

"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6

loader

CUARESMA -SEMANA SANTA

Me inscribo