Reflexiona

A veces, cuando experimentamos personalmente a Dios activo y moviéndose en nuestra vida, Él nos llama a cosas que quizás no comprendamos o sobre las que nos sintamos un poco inseguros. Es posible que no veamos la naturaleza exacta de cómo se desarrollará el plan de Dios con el tiempo. Sin embargo, el punto no es tener todo resuelto desde el principio, sino inclinarse hacia el Espíritu con fe y confianza expectantes, de que estás respondiendo a la voluntad de Dios lo mejor que sabes.

Ora

Querido Dios, a veces no entiendo el plan, lo que estás haciendo en mi vida. Dame el deseo de confiar más profundamente en ti con todos los deseos de mi corazón; sabiendo que siempre sabes lo que estás haciendo conmigo y para mí. Amén 🙏

Actúa

¿Cuáles son las situaciones que pesan sobre tu corazón y tu mente en este momento? Pídale a Jesús que te ayude a confiar más en Él con estas preocupaciones, con los deseos más profundos de tu corazón.