Una fe sólida como una roca
Antes de comenzar tu retiro, prepárate tomando una pausa para relajarte. Respira lenta y profundamente. Cuando estés relajado, deja que la presencia bondadosa de Dios te llene con cada respiración que tomes.
Primero, lee: Santo Evangelio según San Mateo 16,18.
Pues yo te digo que tú eres Pedro y sobre esta piedra construiré mi Iglesia, y el imperio de la muerte no la vencerá.
Ahora, reflexionemos brevemente sobre lo que hemos leído:
Jesús le confió a Pedro la edificación de la Iglesia, no porque fuera un hombre de intelecto superior, riqueza o poder, sino porque la fe de Pedro y su amor por Jesús eran tan sólidos como una roca. Estos cimientos tan sólidos de fe y amor se manifiestan hoy en las Marcas de la Iglesia: una, santa, católica y apostólica. La Iglesia está hoy dirigida por los sucesores de los apóstoles: el papa y los obispos. La Iglesia encuentra su fortaleza en la fe y el amor de Jesús.
La lectura anterior, nos invita a cuestionarnos:
- ¿Qué puedo hacer para tener una fe más profunda en Jesús?
- ¿Cómo demuestra mi vida mi amor por Jesús?
Para finalizar, habla con Jesús con tus propias palabras o hazlo con la siguiente oración:
Dios que nos amas, tú nos ofreces misericordia y gracia abundantes a través del agua y del Espíritu Santo. Cultiva en mí un corazón amante y generoso. Amén 🙏🏻
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"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6