POSTRADOS ANTE TI, SEÑOR
ADORACIÓN
CANTO: No adoréis a nadie…
¡Viva Jesús Sacramentado!
¡Viva y del todo sea amado!
Padre nuestro que estás en el cielo…
¡Viva Jesús Sacramentado!
¡Viva y del todo sea amado!
Tres veces y el 4 padrenuestro pedimos por las intenciones del Papa Francisco
SILENCIO, MÚSICA
Adoración amorosa a Jesús
Señor Jesucristo:
Postrados ante ti, que estás presente en el misterio de la Eucaristía,
te adoramos como nuestro Dios y Señor.
Te alabamos y te bendecimos
porque has querido venir a nuestra indigencia
y colmarla de tu presencia y de tu gloria.
MUSICA DE FONDO
De este modo, y para siempre:
tú eres nuestro rey, nuestra vida y nuestro amor,
tú eres nuestra luz y nuestra paz, nuestra alegría y nuestra plenitud,
nuestro sustento y nuestro apoyo,
eres nuestro compañero, amigo y confidente,
nuestro maestro y consejero,
eres nuestra fortaleza, nuestro pastor, nuestro guía,
eres nuestro bienhechor, nuestro consuelo,
nuestro auxilio y nuestro libertador.
MUSICA DE FONDO
Tú, Jesús: eres la pasión de nuestra vida,
la meta a la que tendemos y el ideal al que aspiramos.
Eres nuestro modelo, nuestro bien, nuestra virtud y nuestro mérito.
Tú eres el alimento que nos sacia,
nuestro refugio y nuestro descanso, nuestro hogar y nuestra patria.
Tú, Señor Jesús, eres nuestra esperanza, nuestro infinito... y nuestro cielo.
Athenas - Qué bien se está aquí
MUSICA DE FONDO
Acogemos la Palabra de Dios: Juan 3:16
Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
COMENTARIO TEXTO
Te entregas, Jesús para la vida del mundo… te entregas para que mi vida se salve…
Jesús tú, siempre cumples tus promesas: “nos os dejaré huérfanos… Estaré con vosotros todos los días hasta el fin del mundo».
«Yo soy el Pan de Vida», nos alimentas con tu Cuerpo y tu Sangre… te quedas en el Sagrarios, disponible para acudir a nuestro encuentro.
¡Señor, gracias porque estás presente en el Santísimo Sacramento… aquí y ahora estás con nosotros y nosotros queremos estar contigo!
SILENCIO, MÚSICA
¡Hoy y siempre, ¡Señor, te adoro y te doy gracias porque estás presente aquí ante nosotros!
¡Te adoro, ¡Señor, porque estás vivo y te unes a mí, en mi fragilidad, en mi debilidad, en mi pobre existencia, pero adorándote y alabándote me santifico, me renuevo y me purifico!
¡Gracias, ¡Señor, porque tu Corazón se convierte en mi morada, en mi refugio, en mi lugar de encuentro contigo!
SILENCIO, MÚSICA
Te pedimos que llenes de amor nuestro mundo que sufre. Acoge nuestras súplicas y necesidades, nuestro agradecimiento y nuestra oración. Llena de esperanza el corazón de cualquier persona que se acerca a Él.
Jesús, tu presencia es real. Permaneces en forma de pan consagrado acompañando nuestro camino hacia el Padre.
Jesús Eucaristía nos acoge con ese calor repleto de misericordia, de amor y de ternura!
¡Gracias, ¡Señor, porque te haces presente en tu humanidad y en tu divinidad para acompañarnos en nuestro caminar!
SILENCIO, MÚSICA
COMPROMISO:
La adoración a Jesús Sacramentado, nos hace parecernos más a Dios. Cada tiempo de adoración es un tiempo de transformación, de transfiguración.
Cada adoración nos ayuda a actuar como lo hace el Jesús que contemplamos.
Por eso la adoración nos lleva a construir el Reino de Dios.
BENDITO SEA DIOS.
Bendito sea su Santo Nombre.
Bendito sea Jesucristo verdadero Dios y verdadero Hombre.
Bendito sea el Nombre de Jesús.
Bendito sea su Sacratísimo Corazón.
Bendito sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Consolador.
Bendita sea la Incomparable Madre de Dios la Santísima Virgen María.
Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su gloriosa Asunción.
Bendito sea el Nombre de María Virgen y Madre.
Bendito sea San José su casto esposo.
Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.
Oremos:
Oh Dios, que en este sacramento admirable
nos dejaste el memorial de Tú pasión;
Te pedimos nos concedas venerar de tal modo
los sagrados misterios de Tu Cuerpo y de Tu Sangre,
que experimentemos constantemente en nosotros
el fruto de Tu redención.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amen.
AL HACER LA RESERVA cantamos ¡Gracias quiero darte por amarme!
¡Gracias! 12 personas oraron
"Que sus conversaciones sean siempre agradables y oportunas, a fin de que sepan responder a cada uno como es debido". Colosenses 4:6